junio 30, 2014

Una vida sencilla

En este punto de mi vida, me detengo, agarro la punta del ovillo, y pido:

una vida sencilla;

ver  a la mujer y al niño, tranquilos, bajo la sombra de un árbol;

trabajo para que fluyan las horas y no falte el pan en mi mesa (aunque sea poco, aunque gastemos poco, 

vivamos con poco, apretándonos el cinturón);

tiempo que siempre puede capturarse y robarse para leer y pensar;

madrugadas indulgentes para escribir.

Sé que la vida es corta.

Ya no confiaré tanto del bullicio,

y cuidaré que el tumulto no barra mi juicio.

Tengo planes y sueños que a nadie importa,

pero los cumpliré humildemente, como una nota imperceptible en la música del destino;

a menos que falte tiempo.

Por eso agarro la punta del ovillo, y pido:


una vida sencilla.῀